En el corazón de cada empresa hay personas cuya pasión y experiencia impulsan la innovación y el éxito. En Esypro, contamos con visionarios como Antonio Gregores, nuestro Gestor de Producto. Con una trayectoria marcada por su profundo conocimiento del mercado y su compromiso con la excelencia, Antonio ha sido fundamental en el desarrollo y la evolución de nuestros productos. En esta entrevista exclusiva, tendremos el privilegio de sumergirnos en su visión, explorando su perspectiva única sobre las soluciones que ofrecemos en Esypro.
¿Podrías compartir algunos aspectos destacados de tu trayectoria profesional que hayan sido fundamentales para tu rol actual como Gestor de Producto en Esypro?
Tuve suerte de poder empezar a trabajar muy pronto, durante los estudios de ingeniería industrial, y pude tocar un poco de muchos palos en diferentes sectores y relacionarme con personas de diferentes niveles organizativos. Esto me ayuda a comprender quiénes son los usuarios finales de los sistemas, cuáles son sus necesidades, objetivos, habilidades y limitaciones. He tenido la oportunidad de poder estar siempre en relación constante con proveedores y clientes, viviendo sus procesos y compartiendo sus dificultades. Y obviamente, los 18 años que llevo en esta empresa desempeñando diferentes roles han sido una oportunidad inigualable para aprender del sector.
¿Cómo se ha integrado el rol de Gestor de Producto en Esypro y cuál es su importancia estratégica para la empresa?
Es fundamental tener un producto maduro y confiable, y sobre todo aplicarlo adecuadamente en las diferentes soluciones desde las fases más tempranas de cualquier proyecto. No solo entendemos el producto como una serie de componentes que se montan de una u otra manera. Cuando un cliente decide iniciar un proyecto con nosotros, trabajamos juntos en la especificación, la planificación, el desarrollo, la fabricación, el montaje, la puesta en marcha y la explotación a lo largo de su vida útil. Desde mi punto de vista, la experiencia completa del cliente forma parte del producto entregado. Para que el resultado sea bueno es fundamental tener un equipo que domine todas estas fases y cuente con los recursos técnicos adecuados para ejecutarlas con solvencia. Conseguirlo es un desafío del cual el Gestor de Producto debe participar de manera activa.
¿Cuál es el proceso que tú y tu equipo seguís para el desarrollo de nuevos productos?
Te diría que rara vez una línea de producto nace de la nada en un instante concreto, como el inventor que tiene una idea y se sienta a dibujar cosas en una servilleta como si estuviera en trance. Tampoco existe un proceso tabulado basado en los tópicos de «exhaustiva investigación de mercado y análisis de las necesidades de los clientes». Hay mucho de cuento en todas estas historias.
El proceso de desarrollo de producto normalmente implica una evolución forzada, dura y en muchas ocasiones atropellada, partiendo de soluciones previas aplicadas en contextos nuevos.
Te puedo poner algunos ejemplos de procesos de desarrollo que a mí me parecen interesantes:
La incorporación de la retroalimentación de los usuarios. Parece muy básica, pero los entornos cambiantes que involucran la interacción con diferentes tipos de personas desencadenan la incorporación de una gran parte de las nuevas características, la resolución de nuevos problemas y la mejora de la experiencia del usuario.
La adopción de tecnologías emergentes. Seguimos la evolución de las tecnologías que se ven envueltas en nuestro proceso, de manera que podamos aprovechar las nuevas oportunidades en la evolución del producto, sea para reducir costes y tiempos o para obtener nuevas funcionalidades y mayores niveles de calidad.
La adaptación a los diferentes mercados y situaciones sociales y económicas. La adaptación de nuestro producto a diferentes clientes en sus diferentes localizaciones, con sus particularidades legislativas, culturales y capacidades de amortización de las inversiones, fuerzan la evolución del producto para adaptarse a las diferentes circunstancias. Igualmente, la evolución en el tiempo de las situaciones económicas y sociales dentro de un mismo mercado requiere la aplicación de diferentes productos y de maneras diferentes a lo largo del tiempo, promoviendo, por ejemplo, cambios en los niveles de automatización o la flexibilización de los sistemas para poder afrontar situaciones cambiantes o inestables.
¿Cuáles son las características distintivas que hacen sobresalir a los sistemas intralogísticos de Esypro en comparación con otras soluciones del mercado?
En este caso sí que te voy a responder con un tópico: lo que distingue a los sistemas de Esypro es la dedicación con la que nuestros equipos de trabajo se implican en ellos. Cuando esto es así, todo lo demás sale solo. Puede que todas las empresas digan lo mismo, pero muchas de ellas saben que no siempre es verdad.
¿Qué estrategias o métodos utilizáis para identificar de manera efectiva los problemas y necesidades reales de los clientes, con el objetivo de mejorar los productos?
La única manera es vivir con los clientes su proceso y entender en profundidad las problemáticas del día a día. Fomentamos una cultura de retroalimentación continua y de seguimiento de los sistemas instalados durante todo el ciclo de vida. Además, los clientes se mantienen en contacto con nosotros para el mantenimiento y la evolución de las instalaciones, de manera que a lo largo de los años tenemos una visión global del resultado de todo aquello que desarrollamos.
En el contexto de la sostenibilidad y el compromiso ambiental, ¿cómo garantiza Esypro que sus soluciones intralogísticas sean energéticamente eficientes y respetuosas con el medio ambiente?
Existen varios aspectos relacionados con esta cuestión. El principal de todos es que nuestros sistemas son, por definición, muchísimo más eficientes que cualquiera de los métodos tradicionales. Siempre será más eficiente energéticamente un transporte y almacenamiento de pieza colgada, sea manual o automático, que el uso tradicional de contenedores o cajas que requieren de carretillas elevadoras para su manipulación, con el consumo de energía que eso implica. Igualmente, un manejo más cuidado de las piezas repercute en un menor desperdicio y retrabajo por piezas dañadas.
No obstante, superada esa fase, aplicamos ciertas estrategias para mejorar aún más este aspecto:
Incorporamos principios de diseño sostenible en el desarrollo de nuestros productos desde el principio. La mayor parte de los componentes que utilizamos son de materiales parcialmente reciclados y casi siempre totalmente reciclables, como el acero, el aluminio o los plásticos técnicos, tanto inyectados como mecanizados. Optimizamos los diseños para reducir el consumo de recursos y eliminar los desperdicios, por ejemplo, priorizando el uso de componentes de plástico inyectados que pueden contener un porcentaje de reciclados frente a los mecanizados que producen desperdicios derivados del proceso. Además, es cada vez más común que los procesos óptimos en coste sean también los más sostenibles, porque toda la industria tiende a este compromiso con el medio ambiente, a veces involuntariamente, porque el desperdicio implica coste.
Utilizamos componentes de alta eficiencia energética y calculamos los actuadores de manera que se minimice el consumo de energía durante su operación. Los motores eléctricos que montamos son de primeras marcas y de las categorías de eficiencia energética más altas del mercado. Los componentes neumáticos, igualmente, son de altísima calidad para mejorar el rendimiento y evitar pérdidas de aire comprimido, y están calculados a las dimensiones óptimas para reducir el consumo de aire al mínimo.
Optimizamos los procesos de nuestros clientes. Nuestros sistemas permiten la implementación de estrategias de control inteligente, optimizando las rutas de transporte y secuenciación, priorizando siempre la menor cantidad de movimientos posibles de las unidades de carga y la puesta en stand-by de los componentes no utilizados.
¿Podrías mencionar algún producto específico de Esypro que ejemplifique y refleje las políticas de sostenibilidad de la empresa?
Sin duda, el mejor ejemplo es el esyair. Se trata de un sistema de transporte y almacenamiento de pieza colgada totalmente automático. Además de las características de sostenibilidad que te mencioné antes, gracias a los métodos de control que integra, permite hacer otras muchas cosas interesantes en lo que a sostenibilidad se refiere. Por poner algún ejemplo, podemos conocer en todo momento el estado de los stocks y prever los consumos futuros para manejar lotes de producción optimizados. Permite la preparación anticipada y entrega de las piezas una a una a los puntos de consumo individualizados evitando retornos de embalajes incompletos y la ocupación de espacio en las zonas de producción. Se integra con robots de transporte AMR o AGVs para cubrir aquellas zonas a las que las vías aéreas no pueden llegar. Tiene la posibilidad de integrar zonas manuales en puntos de baja exigencia o para dar mayor adaptabilidad a las condiciones particulares. Podemos decir que es el ejemplo canónico de sistema sostenible.
¿Cuál es tu visión sobre cómo la implementación de tecnologías como la inteligencia artificial impactará en la evolución de los sistemas de manutención industrial?
Creo que puede haber varias líneas de trabajo. La inteligencia artificial está evolucionando mucho últimamente. Uno de los campos de trabajo más conocidos de la IA, por ser el más cercano al público general ahora mismo, es la generación de textos, imágenes y vídeos a partir de prompts en lenguaje natural. Dicho así no parece que tenga una gran aplicación en nuestro sector en el corto plazo, pero el reconocimiento de lenguaje natural puede desencadenar algún que otro avance muy pronto en los sistemas de interfaz con los operarios. Al fin y al cabo, ya muchos de los operarios que interactúan con nuestros sistemas llevan encima una tablet conectada a los sistemas de control y supervisión, que dispone también de micrófono y altavoz o auriculares. Seguramente en breve se puedan utilizar para cosas interesantes.
Uno de los aspectos que me parecen más interesantes es la capacidad de la IA para optimizar las operaciones en función de la demanda al sistema y de los estados de los procesos. Los algoritmos actuales ya pueden analizar grandes volúmenes de datos históricos, parámetros de la producción y estados de los stocks para hacer ciertas cosas como proponer acciones, optimizar lotes y planificar la fabricación. El gran reto ahora mismo es lograr tener los datos necesarios modelados de la manera adecuada para alimentar a una IA. No es posible por ahora prescindir de las predicciones y decisiones intuitivas de un operador experto. Aun así, ya tenemos algunas líneas de investigación en background, aunque solo sea como asistencia al operador a la toma de decisiones en cuestiones de producción y mantenimiento de los sistemas, para estar preparados y cuando llegue el momento dar el salto, al igual que por ejemplo en medicina están haciendo sus pinitos con el diagnóstico de ciertas enfermedades. A nivel de manejo de información y algoritmos utilizados son cosas que tienen más en común de lo que parece.
¿Hay algún avance que puedas compartir sobre los próximos desarrollos en los que Esypro está trabajando actualmente?
Te puedo decir que estamos avanzando mucho en el desarrollo del esyair. Pronto veremos novedades en los componentes mecánicos que nos darán nuevas funcionalidades muy interesantes y también estamos preparando la nueva generación del software de control y supervisión. Tendremos novedades asegurada para finales de este año y el siguiente. Hasta aquí te puedo contar en público por ahora.